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domingo, 1 de noviembre de 2009

“Q.E.P.D.” Jose Martinez Queirolo

“Q.E.P.D.”
Jose Martinez Queirolo

EXCELENTE OBRA DE TEATRO ECUATORIANO

Tercera mención en el II Concurso Nacional de Teatro, 1969.
La pieza fue estrenada por el grupo “Los Guayacanes”, en el IV Festival Nacional de Teatro organizado por el Patronato Municipal de Bellas Artes de Guayaquil, el 22 de julio de 1969, bajo la dirección de Miguel Sarracín.

“Q.E.P.D.”
(Cámara negra. A cada lado del escenario, un par de tablas negras levantadas frente al público y ligeramente inclinadas hacia atrás. A telón cerrado y en la más absoluta oscuridad, se escucha el creciente rumor de un automóvil que corre desenfrenadamente hasta su destrucción total. Un silencio de muerte. Alguien corre telón.
Música y luz: música fúnebre y luz azulada que cae sobre los cuerpos inanimados de Enriqueta y Simón, apoyados sobre las tablas a la izquierda completamente pálidos y muy elegantemente amortajados, los dos personajes permanecen inmóviles, con los ojos cerrados y las manos cruzadas sobre el pecho. (Pausa larga).

ENRIQUETA.- Simón…….. ¿Estás ahí?
SIMÓN.- ¡Estoy! … ¿Y tú?
ENRIQUETA.- ¡También estoy!
(abren lentamente los ojos)
ENRIQUETA.- ¿Has visto cuánta gente?
SIMÓN.- Enriqueta, ¿tus ojos…?
ENRIQUETA.- Abiertos como los tuyos, Simón; pero, de vez en cuando, una mano se acerca y me los cierra!
SIMÓN.- A mí de vez en cuando, se me cae la mandíbula…, ¡se me cae la mandíbula y alguien me la levanta!
(Se le cae, en efecto)
ENRIQUETA.- ¡Que gentiles están! ¿Has visto las coronas?... crisantemos…, claveles..., siemprevivas... ¿Esa cruz tan hermosa, a tu derecha?
SIMÓN.- (Leyendo la tarjeta). El…conde…de Sanjurjo y Calatrava.
ENRIQUETA.- ¿El conde Sanjurjo?... ¡Pero si ya está muerto!
SIMÓN.- ¡Pues se solidariza!... (Ídem). Empleados de Ruibarbo y Cía. , Obreros de Ruibarbo y Cía.
ENRIQUETA.- ¡Son flores de papel!
SIMÓN.- Pero, de todos modos, ¡resulta conmovedor!
ENRIQUETA.- ¡Ah, si pudiéramos conmovernos!
(Cierran bruscamente los ojos. Pausa)
ENRIQUETA.- ¡Simón! ¡Simón!
SIMÓN.- ¡Enriqueta estoy aquí!
ENRIQUETA.- ¿Sientes algo especial?
SIMÓN.- ¿Especial?...No, no precisamente. Es el frío de siempre.
ENRIQUETA.- El frío, el mismo frío… ¡Si nos dieran un Whisky!
SIMÓN.- ¡Creo que, a estas alturas, ni el whisky nos reanima!
ENRIQUETA.- Yo no logro indignarme. “¡Simón tuvo la culpa!”… “¡Simón tuvo la culpa!”…Lo pienso, lo repito, ¡pero todo es inútil!
SIMÓN.- Insistamos, mujer. ¡Puede ser que resulte!
ENRIQUETA.- ¡Tú tuviste la culpa!
SIMÓN.- ¡Tú!
ENRIQUETA.- ¡Tú! ¡Tú!
SIMÓN.- ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú!
ENRIQUETA.- ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú!
SIMÓN.- ¿Te acaloras, querida?
ENRIQUETA.- ¡Puede ser! ¡Continuaremos!
LOS DOS.- (Sacudiéndose ligeramente, mientras se escucha el creciente rumor del automóvil). ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! …
ENRIQUETA.- ¿Quién llevaba el volante?... ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú!
SIMÓN.- ¿Quién llevaba la prisa? … ¡Acelera! ¡Acelera! … ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú!
ENRIQUETA.- ¡Teníamos que llegar! ¡Se trataba de un baile a beneficio!
SIMÓN.- ¡A beneficio tuyo!
ENRIQUETA.- ¡Eran los niños pobres!
SIMÓN.- ¡Era tu vanidad! … ¡Iban a elegir a la mujer más elegante de la ciudad, y tú ya te sentías triunfadora!
ENRIQUETA.- ¡La mujer más elegante de la ciudad! … ¿Acaso no lo soy?
SIMÓN.- ¡Lo eras, Enriqueta!
ENRIQUETA.- ¡Lo soy! ¡Lo soy! … ¡Mírame la mortaja!
SIMÓN.- (Abriendo los ojos, para volverlos a cerrar inmediatamente). ¡¡Bah!!
ENRIQUETA.- ¡Lo soy! ¡Lo fui! …¡Mi triunfo era seguro aquella noche, y estabas orgulloso tu también! … ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú!
SIMÓN.- ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú! ¡Tú!
ENRIQUETA.- ¡Los dos, querido! ¡Los dos! … ¡Íbamos tan alegres!
SIMÓN.- ¡Borrachos, querrás decir!
ENRIQUETA.- ¡Alegres y de prisa! …¡Teníamos que llegar!
SIMÓN.- Y ya ves, ¡No llegamos!
ENRIQUETA.- De repente, ¡aquel hombre haciéndonos señales!
SIMÓN.- ¡Haciéndonos señales a mitad del camino!
ENRIQUETA.- ¡Quería que lo lleváramos!
SIMÓN.- No, no ¡Quería advertirnos de aquel árbol caído que ….
ENRIQUETA.- ¡No te detengas! ¡Sigue!
SIMÓN.- ¡Así mismo dijiste! … ¡Y yo seguí! …¡Seguí! …
(El automóvil corrió desenfrenadamente hasta su destrucción total. Enriqueta y Simón lanzan un alarido, levantando las manos y abriendo desmesuradamente los ojos, para volver, inmediatamente, a su posición inicial).
ENRIQUETA.- ¡Imbécil! ¡Más que Imbécil!
SIMÓN.- Querida ¿Te acaloras?
ENRIQUETA.- ¡Lo intento, pero inútil!
SIMÓN.- ¡Pensemos en la victima! Un pobre hombre indefenso…
ENRIQUETA.- ¿Pero es que hubo una víctima? … Las víctimas, ¡Nosotros!
SIMÓN.- ¡No, querida Enriqueta! Nosotros, ya lo ves, seguimos como siempre… Pero el hombre, aquel hombre, ¡Iba lleno de vida!
ENRIQUETA.- ¡Acelera! ¡Acelera!
SIMÓN.- ¡Un hombre muy humilde! Tal vez, un campesino…
ENRIQUETA.- ¡Acelera! ¡Acelera!
SIMÓN.- ¡Un hombre muy humilde! Tal vez campesino…
ENRIQUETA.- ¡Acelera! ¡Acelera!
SIMÓN.- Un campesino honrado… ¡Un padre de familia! …
ENRIQUETA.- Un padre de familia..., un padre de familia
SIMÓN.- ¡Te acaloras, querida!
ENRIQUETA.- Al contrario, ¡me enfrío!
SIMÓN.- Aceptemos la culpa, tal vez, así resulte… ¡El culpable fui yo!
ENRIQUETA._ ¡Yo¡
SIMÓN._ ¡Yo!
ENRIQUETA._ ¡Yo! ¡Yo! ¡Yo!
SIMÓN._ ¡Yo! ¡Yo! ¡Yo! ¡Yo! ¡Yo! ¡Yo!
ENRIQUETA._ ¡Es inútil, Simón! ¡No tenemos conciencia!
SIMÓN._ No, nunca la tuvimos. ¡El frío continua!
ENRIQUETA._ ¡El frío, el mismo frío!...

(Pausa). Abren lentamente los ojos).

ENRIQUETA._ ¡Sigue llegando gente!
SIMÓN._ Se aproxima la hora, nuestra hora…
ENRIQUETA._ ¡Qué populares somos! ¡Mira cuánto nos quieren!
SIMÓN._ ¡Sí, pero nadie llora!
ENRIQUETA._ ¡Es verdad, nadie llora!... Simón, ¿Cómo me veo?
SIMÓN._ Muy pálida, muy pálida… , ¡con una mosca verde en la nariz!
ENRIQUETA._ ¡¡Ay!! (Haciendo visajes).
¡Espántenme la mosca!... ¡espántenme la mosca!
SIMÓN._ ¡¿Qué no hay un caballero que le espante la mosca a mi mujer?!
ENRIQUETA._ ¡La mosca!... ¡la mosca!... ¡Mi reino por un espantamoscas!... (Al caballero). ¡Mil gracias, muy gentil!... (Los dos cierran los ojos. Entre dientes, a Simón). ¿Quién es? ¡No lo recuerdo!
SIMÓN._ Juanito Pilamunga.
ENRIQUETA._ ¡Qué joven educado! ¿Es de buena familia?
SIMÓN._ ¡Carece de dinero! ¡Asiste a los entierros distinguidos, para poder codearse con la alta sociedad
ENRIQUETA._ ¡Lo tendré muy en cuenta!... Y ahora, ¿Cómo me veo?
SIMÓN._ (Abriendo los ojos). ¡Más pálida que nunca, y toda perfilada!
ENRIQUETA._ ¿No he rejuvenecido?
SIMÓN._ Tienes la edad que tienes. ¡Pareces un fantasma!
ENRIQUETA._ En Estados Unidos me hubieran maquillado, pero aquí… ¡qué descuido!
SIMÓN._ Ya lo ves Enriqueta. ¡Es el subdesarrollo!
ENRIQUETA._ (Abriendo los ojos). ¡Morir, morir allá!... ¡Qué hermoso hubiera sido!... ¡Y volver de cadáver importado!... (Pausa). ¡Simón, te la pasé!
SIMÓN._ ¿Qué?
ENRIQUETA._ ¡La mosca!
SIMÓN._ (Haciendo visajes). ¡¡La mosca!!... ¡¡La mosca!!...
ENRIQUETA._ ¡Cuidado con la boca!... ¡Juanito Pilamunga! ¡Espántale la mosca a mi marido!... ¡Serénate, se fue!
ENRIQUETA._ ¡Se aproxima la hora, y los niños no han llegado!
SIMÓN._ ¡Ni llegarán!... ¡Europa está muy lejos!
ENRIQUETA._ ¡No Habrán tenido tiempo de tomar en avión!
SIMÓN._ No, ¡Nunca tienen tiempo para nada!
ENRIQUETA._ ¡Tiempo para escribir!
SIMÓN._ ¡Tiempo para estudiar!
ENRIQUETA._ ¡No lo saben, Simón! ¡No les han avisado!
SIMÓN._ ¡Se enterarán a fin de mes!
ENRIQUETA._ Sí, ¡A fin de mes nos echarán de menos!
SIMÓN._ ¿A nosotros o al giro?
ENRIQUETA._ A nosotros, Simón… ¡Cuando no llegue el giro!
SIMÓN._ ¡Huérfanos y cretinos!... ¡Qué herederos dejamos!
ENRIQUETA._ ¿Adónde irá a parar nuestro dinero?
SIMÓN. ¡Nuestras cuentas de banco! ¡Nuestros bienes!...
ENRIQUETA._ ¡Los muebles, los inmuebles!...
SIMÓN._ ¡Intereses, acciones, inversiones!...
ENRIQUETA._ ¡Mira cómo le brillan los ojos a González!
SIMÓN._ ¡Mira cómo le tiemblan las manos a Rodríguez!
ENRIQUETA._ ¡La hora se aproxima! ¡Hagamos otro esfuerzo!
SIMÓN._ ¿Qué podemos hacer?
ENRIQUETA._ ¡Tal vez, si nos peleáramos!... ¡Si me llamaras puta!
SIMÓN._ ¡Puta! ¡Puta! ¡Puta!
ENRIQUETA._ ¡Ah!
SIMÓN._ ¿Bostezas?
ENRIQUETA._ No. ¡Suspiro!
SIMÓN._ ¡Puta!
ENRIQUETA._ ¡Cornudo!
SIMÓN._ ¿Nada?
ENRIQUETA._ ¡Nada!.. ¿Te acuerdas de mi primera vez?
SIMÓN._ ¡Primer Acto, Escena Primera, de nuestra Vida Conyugal!
ENRIQUETA._ ¡Fue la gloria! Entonces, ¡casi te amé!...Después, fueron perdiendo fuerza los insultos…
SIMÓN._ ¿Insultos o verdades?
ENRIQUETA._ Las verdades… Y luego, ¡Ya no puede!
SIMÓN._ No te lo permitían. ¡Tus amantes de turno eran celosos!
ENRIQUETA._ ¡Y las tuyas, también! Pero ahora, ahora… ¿No sabes una cosa?
SIMÓN._ ¿Qué?
ENRIQUETA._ ¡Mis senos, Simón!
SIMÓN._ ¿Qué pasa con tus senos?
ENRIQUETA._ ¡Se están poniendo tiesos!
SIMÓN._ ¡Ah!
ENRIQUETA._ ¿No te excitas, querido?
SIMÓN._ Querida, ¡estoy tan frío!
ENRIQUETA._ ¿Q. E. P. D.?
SIMÓN._ ¡Q. E. P. D.!
ENRIQUETA._ ¡Simón! Tal vez sería conveniente separarnos!... Separación de cuerpos y de bienes… ¿No hay Divorcio in-extremis?
SIMÓN._ ¡Ni divorcio in-extremis, ni divorcio post-mortem!
ENRIQUETA._ Entonces, ¿juntos?
SIMÓN._ ¡Juntos!... ¡Inútilmente juntos por una Eternidad!
VOZ DE CURA._ ¡Señor! ¡Absolved las almas de nuestros queridos difuntos Enriqueta y Simón!... ¡Absolvedlas de todos sus pecados y haced que con el auxilio de vuestra gracia, merezcan evadir los efectos de vuestra justicia en el Día del Juicio, gozar de la felicidad de la luz eterna!
¡Concédeles, Señor, el eterno descanso!
CORO._ ¡Y alúmbrelos la luz eterna!
VOZ._ ¡De las puertas del infierno…!
CORO._ ¡Arrancad, Señor, sus almas!
VOZ._ ¡Señor! ¡Escuchad mi oración!
CORO._ ¡Y llegue a Vos nuestro clamor!
VOZ._ ¡Qué en paz descansen!
CORO._ ¡¡Así sea!!

ENRIQUETA._ ¡Simón! ¡Está lloviendo!
SIMÓN._ ¡Es el agua bendita! ¡Nos exorcizan, hija!
ENRIQUETA._ ¿Será cierto que hay cielo?
SIMÓN._ Pues, si hay cielo… ¡hay infierno!
ENRIQUETA._ ¡Ah!
SIMÓN._ ¡Oh!
ENRIQUETA._ ¡Ah!... ¡Mira cómo le brillan los ojos a Fernández!
SIMÓN._ ¡Mira cómo tiemblan las manos a Raimundo!
ENRIQUETA._ ¡Raimundo y todo el mundo!
SIMÓN._ ¡Se acerca!
ENRIQUETA._ ¡Sí, se acercan!
SIMÓN._ Huelen dinero fresco. ¡Buitres!
ENRIQUETA._ ¡Buitres!... ¡Zape!
SIMÓN._ ¡Zape!
LOS DOS._ ¡Zape!

(La luz se va con golpe sordo. A partir de ese instante, Enriqueta y Simón permanecen sometidos a efectos de luz negra).

ENRIQUETA._ ¡¿Te fijaste, Simón?!
SIMÓN._ ¡Nos cerraron la caja!
ENRIQUETA._ ¡Todavía no es hora! ¡No son las cinco y media!
LOS DOS._ ¡Abran!... ¡Abran!

(Abandonando su posición inicial, avanzan y retroceden de acuerdo a lo que dicen, siempre de frente al público y como si, realmente, los estuvieran transportando).

SIMÓN._ ¿Sientes el balanceo?
ENRIQUETA._ ¡Yo voy toda desnivelada!
SIMÓN._ Son las escaleras. ¡Ya nos bajan!
NRIQUETA._ ¡Cuidado con los golpes!... ¡Cuidado con los golpes!
SIMÓN._ La calle, la carroza… ¡Entierro de primera!

(Simulando las sacudidas de una carroza en marcha):

ENRIQUETA._ ¡Qué chofer importante conduce la carroza!... ¿Por qué irá tan de prisa?
SIMÓN._ ¡Tendrá otro compromiso!
ENRIQUETA._ (Al chofer) ¡Despacio! ¡No acelere!... ¡Maneje con cuidado!
SIMÓN._ Llegamos… ¡Ya nos sacan! ¡Nos conducen en hombros a la nueva mansión!
ENRIQUETA._ Y ahora, ¿qué sucede? ¿Por qué nos detenemos?
SIMÓN: ¡fotógrafos!........ ! Sonríe!
(Sonríe. El flash de la cámara fotográfica los ilumina)
ENRIQUETA.- ¿Quiénes llevan mi caja?
SIMÓN.- ¡No sé! ¡No los conozco!
ENRIQUETA.- ¿Y las fajas?..¿Quienes están portando nuestras fajas?
SIMÓN.- (Saludando).El Gobernador…
ENRIQUETA.- (Ídem).El Alcalde…
SIMÓN.-El Rector de la universidad
ENRIQUETA.- Directores de diarios y ministros…
SIMÓN.- ¿No vino el presidente?
ENRIQUETA.- ¡No sé! ¡No Lo distingo!... ¿Y el señor Arzobispo? ¡No veo al Arzobispo!
SIMÓN.- (Haciendo una reverencia) ¡Está en primera fila!
ENRIQUETA.- (Ídem) ¡El siempre tan cumplido!
SIMÓN.- ¡Autoridades civiles, militares y eclesiásticas!
ENRIQUETA.- ¡”De izquierda a derecha”, como dirán los diarios de la mañana!
SIMÓN.- ¡Así es!... Continuamos
ENRIQUETA.- ¡Qué populares somos! ¡Cuánta gente nos sigue!
SIMÓN.-Jerarcas y oligarcas…
ENRIQUETA.- Burócratas, políticos, financistas…
SIMÓN. Banqueros, comerciantes, contrabandistas…
ENRIQUETA.- Contrabandistas, traficantes, agiotistas…
SIMÓN.- ¡Caballeros y damas!
ENRIQUETA.- (corrigiéndolo) ¡Caballeros y damas!
SIMÓN.- Damas alegres…
ENRIQUETA.- Damas tristes…
SIMÓN.- Damas alegremente tristes… ¡Putas, puta!
ENRIQUETA.- ¡Cornudos, cornudo!
SIMÓN.- Niños mal, niños bien…
ENRIQUETA.- ¡Go – gol!
SIMÓN.- ¡Ye, ye!
ENRIQUETA.- Invertidos, pervertidos, alcahuetas...Simón, ¡De todo un poco!
SIMÓN.- ¡Y de lo poco, lo mejor!
ENRIQUETA.-Y allá al fondo, en el fondo…
SIMÓN.- Los empleados y obreros de Ruibarbo y Cía.
ENRIQUETA.- ¡Resulta conmovedor!
SIMÓN.- ¡Ah si pudiéramos conmovernos!
(Pausa. Se encuentran detenidos a la altura de las tablas de la derecha)
ENRIQUETA.- ¡Simón!
SIMÓN.- ¡Enriqueta!
ENRIQUETA.- ¡El secretario del sindicato!... ¡El comunista!
SIMÓN.- ¿Dónde?
ENRIQUETA.- ¡Allá!... ¡Tras el mausoleo del conde de Sanjurjo!
SIMÓN.- ¡Es el! …¡Tienes razón!
ENRIQUETA.- ¡Ha venido también!... ¿Te fijaste que, en el fondo, nos quería?
SIMÓN.- ¡Desconfía, Enriqueta!
ENRIQUETA.- ¿Crees tú que…?
SIMÓN.- Algo trama, seguro. ¡Habrá venido a repartir volantes!
(Retrocediendo bruscamente, como si lo empujaran hacia el nicho...)
ENRIQUETA.- ¡Ah!
SIMÓN.- ¡Oh!
ENRIQUETA.- ¡Ah!
(Pausa. Una luz amarilla cae sobre los cuerpos inanimados de Enriqueta y Simón, apoyado sobre las tablas de la derecha)
VOZ DE RAIMUNDO.- !Simón Ruibarbo!... ¡Enriqueta de Ruibarbo!...En nombre de una sociedad mutilada en la persona de dos de sus miembros más distinguidos y queridos…En nombre de la dolce vita que por la dolce morte abandonáis… ¡Con el corazón embargado de dolor, vengo a pronunciar ante Uds. El fúnebre discurso de rigor)
SIMÓN.-¡Es la voz de Raimundo!
ENRIQUETA.-¡El muy hipócrita!
VOZ.- Conocedores de nuestras frecuentes giras alrededor del mundo, nada extraño seria que –Agotado vuestro itinerario en este valle de lágrimas- , hayáis decidido embarcarlos en el yate Caronte, para emprender un viaje de placer al otro mundo. Sin embargo, tratándose como se trata de un viaje sin retorno, nos resistimos a creer que de un momento a otro -¡Sin baile de despedida ni equipaje!-, Uds. Ya se encuentran embarcados… (Llorosa.)¡Enriqueta! ¡Simón!¡Amigos queridos! ¿Pero es que, en realidad, estáis allí?
LOS DOS.- ¡Aquí estamos! ¡Aquí estamos!
VOZ.- ¡Vuestro silencio es elocuente y nos confirma, una vez mas, lo que nos resistíamos a creer!... ¿Para qué continuar, entonces? ¿Para qué seguir prodigando inútiles palabras, cuando estáis decididos a dejarnos para siempre?
LOS DOS.- ¡Esperen! ¡Esperen!
VOZ.- ¡”El muerto al hoyo y el vivo al bollo”!...Así pues, amigos queridos unidos para siempre en la vida y en la muerte, ¡Q.E.P.D.!...¡Q.E.P.D, Enriqueta y Simón!... ¡Adiós!... ¡Adiós!...
ENRIQUETA.- ¡Se van!
SIMÓN.- ¡Nos dejan!
ENRIQUETA.- ¡Adiós, Raimundo! ¡Adiós a todo el mundo!
SIMÓN.- (Corrigiéndolo) ¡Hasta pronto Enriqueta!
ENRIQUETA.- ¡Es verdad! ¡Hasta pronto!... ¡hasta pronto!...
(Pausa larga)
ENRIQUETA.- Simón… ¿Estás ahí?
SIMÓN.- ¡Estoy!.. ¿Y tú?
ENRIQUETA.- ¡También estoy!
ENRIQUETA.- ¡Al fin solos!
SIMÓN.- ¡Al fin!
ENRIQUETA.- ¡Hermoso el mausoleo!
SIMÓN.- En barrio residencial, frente a la tumba de Sanjurjo…
ENRIQUETA.- ¿Con bar y calefacción?
SIMÓN.- ¡Por supuesto!
ENRIQUETA.-Pero nadie ha salido a recibirnos, a darnos la calurosa bienvenida… ¡Que falta de educación, Simón!
SIMÓN.- ¡Un ligero descuido!... (Llamando con voz de niño.) ¡Papi! ¡Mami!... ¡Aquí está vuestro chimoncito!... (Pausa) ¡Abuelo! ¡Abuelita!... ¡Monchito se casó, y ahora les trae a su nueva nieta para que la conozcan!
ENRIQUETA.- (ídem) ¡me llamo Enriqueta, papi-mami! ¡Y para Uds. , Queta!...!soy decente y de familia adinerada! ¡Monchito comprobó que era niña antes del matrimonio!... (Pausa. Impaciente en voz alta:) ¡Señor Ruibarbo y Cía.! ¡¿Están aquí?!
SIMÓN.- (en voz baja) Ruibarbo I está a la izquierda; Ruibarbo II, a la derecha… Ruibarbo III está en el cerro, porque era de la rama torcida… ¡mi viejo está precisamente encima tuyo!
ENRIQUETA.- ¡Hum!
SIMÓN.- ¡Deben estar resentidos todos ellos, porque el Dos de Noviembre no vine a visitarlos!... (llamando) Ah, de la casa!... ¡Ah, de la casa!...
ENRIQUETA.- (ídem) ¡De la casa, ah!
SIMÓN.- ¿Nada?
ENRIQUETA.- ¡Nadie!
SIMÓN.- ¡Habrán salido a penar!
(Pausa)
¿Sientes algo especial?
ENRIQUETA.- no, no precisamente. Lo mismo de siempre
SIMÓN.- debemos prepararnos para nuestra vida
ENRIQUETA.- ¿Qué diferencia hay?
SIMÓN.- ¡Nos crecerán los pelos y las uñas!
ENRIQUETA.- ¡Le encargué a Evangelina que cada cierto tiempo, me viniera a peinar y hacer la manicure! ¡Por lo demás…!
SIMÓN.- ¿Te aburres?
ENRIQUETA.- ¡Si, me aburro!
SIMÓN.- Es preciso hacer algo, algo.
ENRIQUETA.- ¿Qué tal si invito a los vecinos, y organizamos una danza macabra?
SIMÓN.- ¡Bah!
ENRIQUETA.- ¡Ya está!... ¡hablemos del honor de los demás!
SIMÓN.- Repertorio agotado ¡ya no tenemos nada que decir!
ENRIQUETA.- ¡Pero, Simón… ¡hay que matar el tiempo de algún modo!
SIMÓN.- ¡Muerto está!...tal vez si se te ocurre algo nuevo, interesante… algo que no hayamos hecho todavía…
ENRIQUETA.- Que tal si recogemos nuestros pasos
SIMÓN.- ¡Volver a mentir, a fingir, a explotar!...
ENRIQUETA.- ¡A explotar, a robar, a fornicar!...
SIMÓN.- ¡Bah!
(Pausa. La luz que cae sobre sus cuerpos se va tornando verde)
ENRIQUETA.- ¿Apestamos, Simón?
SIMÓN.- ¡Cómo siempre querida!
(Pausa)
SIMÓN.- ¡Je!
ENRIQUETA.- ¿Qué es?
SIMÓN.- ¡No sé! ¡Algo me hace cosquillas!...!je!je!
ENRIQUETA.- ¡ji! ¡A mí también!
SIMÓN.- ¡je! ¡Je!
ENRIQUETA.- ¡ji! ¡Ji!
SIMÓN.- ¡Los gusanos, mujer!
ENRIQUETA.- ¡Los gusanos, Simón!
SIMÓN.- ¡Salen de cabeza, je!
ENRIQUETA.- ¡Salen del corazón, ji!
SIMÓN.- ¡Je! ¡Je! ¡Je!
ENRIQUETA.- ¡Ji! ¡Ji! ¡Ji!
SIMÓN.- ¡Finalmente!
ENRIQUETA.- ¡Por fin!
SIMÓN.- ¡Esto es vida!
ENRIQUETA.- ¡Mejor que el whisky!
SIMÓN.- ¡Mejor que las drogas!
ENRIQUETA.- ¡Mejor, mucho mejor!
SIMÓN.- ¡Pícame gusanito!
ENRIQUETA.- ¡Cómeme, gusanito!
SIMÓN.- ¡Así! ¡Así! ¡Así!
ENRIQUETA.- ¡Ji! ¡Ji! ¡Ji!
SIMÓN.- ¡Je! ¡je! ¡je!
(Ríen, muertos de gusto, mientras la luz desciende y el tablado queda sumido en las tinieblas)

1 comentario:

Unknown dijo...

quero saber onde consigo autorização para montagen desse espetaculo
por favor me informe
meu email é

jamgel@hotmail.com